Publicidad nativa vs. marketing de contenidos: ¿cómo atraer a tu audiencia?
Hemos tocado varios aspectos sobre el marketing en este blog, pero aún existe la duda entre dos conceptos básicos. Hoy discutiremos el concepto de publicidad nativa y si el contenido puede ser una herramienta para ponerlo en práctica de la forma más efectiva.
¿Qué es la publicidad nativa?
La publicidad nativa consiste en presentar un producto no solo de manera no invasiva, sino también no intrusiva. Sin embargo, el material presentado es solo una parte de la idea o contenido principal.
Muchas personas ven a la publicidad tradicional como algo abusivo, como los anuncios que aparecen cuando estamos viendo una película, mensajes emergentes que interrumpen nuestra navegación por internet, canciones con propagandas molestas que se escuchan en la radio y letreros desplegados desde edificios o ventanas.
El concepto habitual de publicidad se considera invasiva, pues muchas veces, invade nuestra percepción privada, como usuarios, cuando vamos al cine, navegamos por internet, viajamos o realizamos actividades lúdicas. Esto es lo que ha originado una alternativa denominada «publicidad nativa».
Cuando se trata de promocionar un producto, el objetivo principal no se centra en ofrecerle al cliente potencial todas las características y beneficios de nuestro producto o servicio, sino conseguir que el destinatario perciba que nuestra oferta es la mejor solución para su problema. La mejor manera de lograrlo es que el consumidor sienta curiosidad por nuestra oferta. Por eso es importante que los mensajes promocionales no sean demasiado informativos para evitar abrumar o agobiar al receptor.
¿Cómo se ve en la práctica?
Cuando se trata de promoción, una publicidad nativa bien estructurada nos ayudará a lograr mejor nuestros objetivos de ventas. Esto incluye cualquier tipo de contenido como artículos, películas u otros medios que tienen como objetivo presentar información para resolver un problema. De este modo, se presenta indirectamente la oferta sin que el destinatario perciba las intenciones reales del anuncio.
Por lo tanto, la publicidad nativa se opone en las medidas y conceptos de la tradicional, como CTA (llamada a la acción) y outbound marketing o el mercadeo de salida.
Esta innovadora propuesta deja atrás aquellos aspectos de la publicidad que tradicionalmente hemos visto como negativos. En vez de exhortar u obligar, estaremos presentando algo sin imponerlo; no persuade, sino introduce algo naturalmente en el contenido, evitando el uso abusivo de la fuerza para alcanzar un objetivo.
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¿Qué no es la publicidad nativa?
La publicidad nativa no se trata de simplemente agregar algunas palabras sobre un producto específico en los artículos. En cambio, implica incluir el anuncio de forma natural y no como el único factor que influye en la validez del material presentado. Es por ello que los artículos patrocinados, aunque brindan información acerca del producto o servicio, no suelen ser un ejemplo de la publicidad nativa. La diferencia es muy sútil, y la descubriremos en breve.
El producto o servicio que estamos ofertando no es la base del contenido que se presenta en la publicidad nativa; no podríamos decir eso sobre el artículo patrocinado, ya que su objetivo es persuadir directamente para adquirir el producto o servicio.
Cuando se trata de lograr un objetivo comercial, hay dos caminos a tomar: persuasivo o sugerido. La publicidad nativa propone solo un tema, sin intentar vender nada directamente, mientras que los artículos patrocinados buscan alentar a los consumidores para que compren la oferta inmediatamente. La primera se lleva a cabo a través de asociaciones y la segunda emplea maneras más agresivas.
Vamos a presentarlos en el ejemplo específico. Queremos anunciar equipos de escalada. Si encargamos la creación de un contenido que describa algunos elementos del equipo, como los mejores piolets alpinos (sobre los cuales queremos posicionar nuestra marca), estaremos ante un artículo publicitario tradicional.
Sin embargo, si queremos hacerlo de una manera más sutil, podemos escribir contenido sobre los senderos de montaña más exigentes del Reino Unido y agregar información sobre piolets, ya que son necesarios para tal desafío. El texto presenta su valor incluso si eliminamos información sobre nuestro producto. Además, este mensaje será una extensión natural del conocimiento ya adquirido por el lector.
¿Ves? Este es el núcleo de la publicidad nativa.
Entonces, ¿existen similitudes entre la publicidad nativa y el marketing de contenido?
Hay una amplia variedad de opiniones al respecto.
El marketing de contenidos ofrece material interesante sobre temas relevantes; en otras palabras, promocionar a través de contenidos. Sin embargo, depende de varios factores, como el tipo, ubicación naturaleza y longitud del contenido que crearemos. El objetivo final es generar una imagen positiva asociada con alguna industria, por ejemplo, marketing o publicidad. La meta aquí es llamar la atención de la audiencia con contenido interesante e inspirador.
¿Son similares estos conceptos? No necesariamente: el marketing de contenidos se expande más allá de lo que la publicidad nativa abarca, aunque esta última es una herramienta útil a la hora de crear contenido. El marketing de contenidos es una estrategia efectiva de implementar las suposiciones y tácticas de la publicidad nativa.
Los creadores de contenido pueden preparar textos acorde con los principios de la publicidad nativa. Esta técnica tiene sus beneficios como lo mencionamos anteriormente. Aunque no todos los productos pueden anunciarse de manera discreta, es importante mantener esta estrategia en mente cuando se planifique y lleve a cabo un plan de marketing.
Resumen
- La publicidad nativa es una táctica publicitaria no invasiva que se mantiene en oposición a las técnicas tradicionales destinadas a persuadir al destinatario para que adquiera cierta oferta.
- Sus supuestos se pueden implementar a través del marketing de contenidos de forma natural.
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